Los
fractales geométricos clásicos tiene su origen a finales del siglo XIX o a
comienzos del siglo XX. Tachados de monstruos matemáticos por algunos
famosos matemáticos de la época como Poincaré, sirvieron para alentar la
búsqueda rigurosa de conceptos como infinito, curva continua o dimensión.
Fueron recopilados por Benoît Mandelbrot a mediados del siglo XX, dando
origen a una nueva teoría geométrica: los fractales.
El origen de la geometría fractal y de los
fractales, habría que establecerlo hacia 1875-1925, cuando se produce una
crisis en la definición de dimensión, y se discrepa con la idea que se había
aceptado hasta entonces, según la cual se concebía la dimensión como número
de coordenadas. Probablemente, el primer objeto fractal puro en la historia,
es el conjunto o polvo de Cantor, que fue descrito en 1890 por el matemático
alemán Georg Cantor.
En
este apartado hemos recogido los fractales geométricos clásicos: